Desde que llegamos a Panamá, una de las cosas que habíamos dicho que íbamos a hacer era conocer más Latinoamérica. Me siento feliz de que en un espacio de 6 meses hemos visitado dos países de Latinoamerica: Costa Rica y ahora Colombia, bueno Bogotá. Algo que siento que fue diferente de este viaje es que aunque tenía mucho deseo de conocer Bogotá, no tenía expectativa y eso hizo que lo disfrutara aún más!
Bogotá era un destino que teníamos super pendiente hacer desde hace varios años y lo que nos pasaba era que esperábamos mucho tiempo y cuando queríamos comprar boletos, estaban demasiado caros; por eso para esta ocasión nos organizamos con tiempo. Lo primero que hicimos fue ver las fechas en que nos podíamos ir sin tener que pedir muchos días de vacaciones del trabajo. En Panamá están los Carnavales, que por lo regular son hasta 5 días libres, fue la fecha perfecta.
Lo segundo que hicimos fue investigar el tema de los boletos aéreos. Confieso que tengo una obsesión con las millas, y en este viaje le sacamos provecho; al final solo pagamos $217 por ambos boletos al utilizar las millas, y no se fueron tantas tampoco.
Este ha sido uno de los viajes más baratos que hemos hecho y realmente siento que le sacamos bastante provecho.
Antes de compartirles el itinerario, es importante tomar en cuenta que justo nos agarró un tiempo de lluvia, por lo que algunos planes que teníamos como caminar en la Zona T y repetir La Candelaria, no lo pudimos hacer.
Una vez teníamos la fecha confirmada y los boletos, reservamos de una vez el hotel. Investigamos en Airbnb, hoteles y al final nos decidimos quedar en Selina. Para mi fue la mejor decisión que hicimos, además de que es super cool el ambiente, me pareció económico, incluía desayuno y estaba super rico.
Hablamos con unos amigos de mi mamá. Una pareja colombiana súper amable, vivieron un tiempo en Dominicana y eran estudiantes de yoga de mi mamá; ahora son casi familia. Desde el principio reservamos dos noches para cenar con ellos: una noche en Usaquén otra en Andrés Carne de Res de Chía.
Luego entonces comencé a hacer el Master Document (MD). Es un documento maestro donde pongo el itinerario y el presupuesto. Si has leído algún otro artículo de viaje que he escrito, sabes que mi primera recomendación es investigar e imaginarse que uno es rico, comenzar a poner cosas en el itinerario y luego la vas ajustando.
Eso mismo hicimos, investigamos todo lo que queríamos hacer y lo comenzamos a poner en el itinerario. Mauricio, el soulfull husband, fue que consiguió los dos tours que hicimos: el de la ciudad y el de la Catedral de Sal. Hubo una confusión y en el tour de la ciudad, pensábamos que era grupal y terminó siendo privado. Para nosotros esto fue perfecto, especialmente para Mauricio porque nos pudimos detener en algunos temas puntuales y dedicarle más tiempo a cosas históricas. A Mauricio le encanta la historia.
En el city tour, fuimos al Cerro de Guadalupe. Íbamos a ir al Cerro de Monserrate pero estaba cerrado ese día por un evento de RedBull. También fuimos al Museo del Oro, al Museo de Botero, a La Candelaria, a un tasting de café y al Callejón el Embudo. De verdad que este tour nos encantó y siento que fue la mejor forma de comenzar a conocer Bogotá.
Esa noche fuimos con los amigos de mi mamá a Andrés Carne de Res de Chía y lo más cool era que justo esa noche el tema era el Carnaval de Barranquilla, así que los personajes nos alegraron un montón la noche.
El segundo día en Bogotá fuimos a la Catedral de Sal y a Zipaquirá. La Catedral es un lugar que recomiendo a todos ir. En la Catedral también me compré mi lámpara de sal que tenía pendiente comprar desde hace un buen tiempo. En ese tour nos llevaron a comer a un restaurante típico donde probé la bandeja paisa, no es ayurvédica, pero estaba bien rica.
Como les estoy compartiendo el itinerario, no voy a compartir el lujo de detalle, pero los últimos dos días en Bogotá, por la lluvia no pudimos hacer tanto, también fueron mis primeros dos días del ciclo, tenía muchos malestares y poco deseo de hacer cosas; le agradezco demasiado a Mauricio haber sido tan bueno y understanding de mi situación. Pudimos subir a Monserrate, que aunque subimos con mucha lluvia, luego aclaró y pudimos apreciar la vista. También pudimos probar un restaurante riquísimo orgánico llamado Suna, con opciones veganas, vegetarianas, etc.
Algo a tomar en cuenta es que comimos demasiado rico todo el tiempo, Harry Sassom fue excelente! Gaira también fue excelente!
Te dejo un resumen de todo lo que hicimos:
Restaurantes:
1. Andrés Carne de Res de Chía
2. Gaira Café
3. Harry Sassom: excelente para ir en pareja
4. Brera: Italiano, riquísimo
5. Suna: orgánico con opciones vegetarianas y veganas
6. Wok Usaquén: comida asiática
7. Bogotá Beer Company (BBC)
Lugares a visitar:
1. Usaquén: no llegamos a ir al mercado, pero hay muchos restaurantes
2. La Candelaria
3. Museo del Oro
4. Museo de Botero
5. Cerro de Guadalupe
6. Cerro de Monserrate
7. Callejón el Embudo
8. Catedral de Sal
9. Zipaquirá
Definitivamente que Bogotá es una ciudad impresionante y siento que nos faltaron muchos sitios más por conocer, así que tenemos una excusa para regresar.
Te invito a compartir este artículo con tu tribu!
Aquí te comparto algunas fotos:
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